domingo, 24 de agosto de 2014

Ecos desde los boxes: de un lugar nada relajante






QUE IBA QUEDANDO MENOS PARA BÉLGICA




Pues seguro no será una carrera nada relajante, por mucho que la pista se llamé Spa, pues también se encuentra a caballo, cerca de otros tres municipios, los de Francorchamps, Malmedy y Stavelot. Que sobre su asfalto siempre hay incidentes, las condiciones son cambiantes, el tiempo meteorológico va a lo suyo, no respetando nada ni a nadie a la hora de desencadenar lluvia, rayos y truenos. Para remate y subiendo a todo gas, los pilotos deberán afrontar algo llamado “Eau rouge”, una pared de asfalto y encima, en curva en su entrada y en su salida. 


Willi Webber. De: bunte


Mr. Twenty”, no, no me refiero a ninguna red social, ni tampoco "sucial", que hay algunas bastante cutres, sino a Wilhelm Fiedrich Webber, conocido por todos como “Willi”. Fue durante años el representante de Michael Schumacher, su hermano Ralf o “little Schumi o Maikolin” y más recientemente de Nico Hulkenberg, hasta el 2011. Coloquialmente le representaba un número, el 20%, pues era la tajada que sacaba al mover los asuntos del Kaiser, o de cualquier otro. Hombre directo en el hablar, algo despótico en las formas, nos dejo estas dos perlas; la primera “el pescado se pudre por la cabeza”, en relación al decaimiento en el número de espectadores pendientes de la fórmula 1. El segundo, directo a la mandíbula de los verdaderos protagonistas del mismo: “los pilotos son unos debiluchos que no dejan de quejarse todo el rato por la radio”. Que solo le faltó llamarles nenazas.

Como “Wx2” tiene estopa, o parte basta del cáñamo, el de fumar no, para repartir por los cuatro puntos cardinales, también tuvo un “afectuoso recuerdo” para alguien recientemente exonerado, o eso dicen, por un caso de corrupción a través de la fiscalía de Munich, “Ecclestone está demasiado viejo para abarcar la era de los nuevos medios”. Además añadió, “a Jean Todt le falta fuerza para imponerse”. Así que se puede observar a las claras que este hombre nacido en Regensburg en 1942, no tiene problemas con la lengua, sea cual sea el idioma hacia donde dirija con precisión de cirujano sus epítetos. Quien sabe que caminos tomaría el circo en sus manos, quizás unos desde luego más emocionantes, más a las claras, más de antaño y sobre todo, más ruidosos.

Habréis oído muchas veces lo de “la botella puede estar medio llena o medio vacía”, sin que me refiera a ninguna alcaldesa en particular, de corto nombre de pila, Ana. También lo de “todo depende del color del cristal con el que se mire”, siempre y cuando no se utilice “Lucy & the Sky with Diamonds” o pellote a saco. Pero por mucha positividad que uno le pueda poner, es llegar “Iceman” abrir la boca y quedarte carámbano, helado vamos. Que todos sabemos que una carrera como la Hungaroring, no borra las decepciones de las anteriores, pero también es verdad ¡alma de cántaro finesa! que en algún lugar deberá existir el punto de inflexión, la palanca que todo lo mueve, el lugar donde las cosas puedan ir a mejor. Solo recordad aquel “somewhere over the rainbow”, donde dejarán de mostrarse algo pochas y pasaran a estar más lozanas, más saludables.


Raikkonen. Australia 2014. De: worldcarfans


Una de las canciones que encumbraron a la fama al grupo “Pet Shop Boys” se titulaba “You were always on my mind”, es decir, “siempre estabas dentro de mi sesera”. Pues pasando esto a futuro, Button nos reveló que “Quiere pilotar para siempre, que en la fórmula 1 hay emociones por todos los lados”. Y es que a Jenson le gustan los subidones de adrenalina al pilotar y también los bajones. No aclaró si esos se dan al descender del coche o por el contrario al caer en la cuenta de que el suyo no corre ni dándole empujones, máxime cuando está propulsado por un “German V6”, el de Mercedes. Además como ya “ha ganado muchas carreras para McLaren, no tiene que demostrar nada a nadie”. Desde luego el británico es de los de “cría fama y … échate al monte moreno”, aunque él sea algo rubio.

No le sentó muy bien desde el punto de vista “espiritual”, el paso del tequila José Cuervo al vodka Smirnoff, y mira que en su coche, tras él, pone en grandes letras “Claro”, como afirmándolo. Que me refiero evidentemente al piloto mejicano Sergio Pérez, perteneciente al grupo “de las grandes chufas”, junto al brasileño Felipe Massa & Pastor Maldonado. Y es que a pesar de atesorar tres “out”, dos décimos, dos novenos, un sexto y un meritorio tercer puesto en Bahrein, “se ve en la pomada”. Baraja según sus palabras “cambiar de quipo y volver a pelear por los títulos”, aunque seguramente “no se mueva” de Force India. En estos casos, creo yo, no se debe confundir el tener los pies en el suelo, saber realmente que suelo pisas, dejándote de ensoñar cosas irreales, fantásticas, quiméricas, utópicas e ilusorias.

Hablando de cosas más sólidas, más tangibles y reales, nadie puede poner en duda el enorme salto dado por el equipo Williams, tras varias temporadas de oscuridad, con paupérrimos resultados. Este multilaureado team, luce en sus vitrinas nueve campeonatos de constructores, más otros siete de pilotos. Evidentemente el buen diseño del monoplaza de esta temporada, aunado a un excelente propulsor de la categoría del fabricado por Mercedes, ha obrado milagros. Rob Smedley, responsable de rendimiento del equipo, cree que quizás “estén desarrollando el coche algo rápido”. Pues en mi opinión en el mundo de la competición, jamás se va demasiado veloz y mucho más después de un relajante vaso de Martini bien frio, pues todos sabemos que “No Martini, no party”, que ya lo dijo George Clooney.




Hubo rumores que flotaron en el aire, como el titulo de aquella canción, “Love is in the air”, interpretada a finales de los años 70 por John Paul Young, de una salida muy sonada en la fórmula 1. Que se hablaba ni más ni menos de Luca Cordero di “Montezeporro”, rumbo a presidir la reciente gran fusión entre Etihad Airways, aerolínea bandera de los Emiratos Árabes, y Alitalia, su homóloga italiana. Fue el propio Luca quien desmintió tales cotilleos así: “después de mi familia, no hay nada más importante que presidir Ferrari” dijo. Que me parece muy loable su decisión, aunque quizás puntualizar que una escudería de fórmula 1, nunca deberá ser llevada de la misma forma que la parentela, pues esta afecta a los sentimientos, mientras que la otra lo hace a los negocios, la competición, el prestigio y la leyenda.

Un espejismo se define como “una ilusión óptica, en la que se ve algo que en realidad no existe”. Que lo digo por lo declarado por Christian Horner sobre su pupilo Sebastian Vettel “está agotado por sus cuatro años de superioridad”. Pues sinceramente ¡ni que hubiese estado picando piedra en una cantera, leches! Luego sin embargo supimos que el nuevo sistema de frenado, e imagino que se referirá al Brake by Wire, que lo llevan todos los pilotos, hace que “pierda sensaciones con el coche”. Ahora tampoco puede cuidar los neumáticos como antaño, aunque nada ha cambiado en ellos. El remate vino con esto: “Vettel conducia como una bailarina”, parece ser que al accionar acelerador y frenos en los buenos tiempos, cuando su Red Bull ganaba como un rodillo tocho, una carrera tras otra; “better, no comment”.

Luego llegaron más subterfugios, para entendernos, justificaciones. Así mentó “la cantidad de problemas mecánicos que Sebastian ha tenido, pequeñas cosas que han interrumpido su flujo”. Como todo no puede ser horroroso y sobrecogedor, en Hungría “le están volviendo las sensaciones otra vez”. No hace falta decir, que cada uno defiende a los suyos, que Red Bull “te da alas”, incluso para largar obviedades. Que solo hace falta ver como rula el carro de Daniel Ricciardo, para comprobar que el actual bólido de la bebida energética no es manco para nada. Claro está muy lejos, y solo el de Vettel, de aquel que humillaba de morro, flexaba las alas, traccionaba sin patinar, circulaba sobre carriles, que hasta las gomas se le hacían a medida. Que me refiero a las de los soportes motor claro está, pues yo pensar mal, nunca, “never, jamais, nie”.


Mercedes V6 Power Unit. Silverstone 2014. De: Sutton


La llegada de los nuevos propulsores V6 Turbo, donde la “V” debería significar “victory”, no está siendo la esperada. Así lo constatan día sí, día también, gentes implicadas en el mundo de la fórmula 1. De manera muy gráfica se mostró Eric Boullier, tipo no muy dado a las estridencias por cierto: “nos estamos disparando en el pie nosotros mismos” dijo recientemente. Que en opinión del francés, las nuevas tecnologías no hacen más que acercar la competición a los aficionados y se están dejando de lado. Niki Lauda por su parte, puso como ejemplo la manera de vender eficazmente la carrera de Austria, utilizando no solo la radio y la televisión, sino también algo llamado internet. Que a fin de cuentas, se refiere a una red de redes, lo conocido por “www”, para entendernos, algo casi inabarcable, extenso y en constante crecimiento.



© Sammas



Ver otros ecos:


“Artículo original en caranddriverthef1.com”

“One week later: Hungaroring – Hungría 2014”

“Dentro de un telón, que decían que era de acero”

 “One week later: Silverstone - Gran Bretaña 2014”

“One week later: Red Bull Ring - Austria 2014”

Información de F1 en: "Ecos desde los boxes"




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