¡CREO QUE CON BUENAS INTENCIONES NO IRÁN A NINGÚN LADO!
Desde Fiat no hacen otra cosa que insuflar energía hacia la Scudería Ferrari.
Así que les tiran flores, diciéndoles lo mucho que valen. Es un poco
como los padres hacia sus hijos shicos,
manifestando a cada rato aquello de ¡chaval,
que vales un potosí! Deciros que esta expresión viene de una lejana montaña
en Sudamérica, que andaba repleta de plata. Claro está que para obtenerla, fue necesario picar millones de toneladas
en oscuros túneles mineros, pues la argentum es un subproducto de las rocas que
contienen cinc, cobre, plomo e incluso oro.
El nuevo presi de Fiat Group, John Elkann, nietísimo de Gianni
Agnelli y mozalbete de tan solo 38 años, ya
aventura un complicado comienzo de temporada para los de Maranello.
Desde luego y como arranque, nada apasionante, casi como dejarse dos kilos de
goma en la parrilla al ver apagarse los semáforos. Más tarde nos contó eso de “se
está trabajando duro”, aunque seguro que sabe muy bien que eso no es
sinónimo de éxito, tras tantos años de “meter el cuezo”, es decir, errar, tomar decisiones equivocadas.
Continuó, al igual que Marchionne, con lo de los propósitos de mejorar con el
paso de los meses. Y para terminar lo mejor, “el objetivo será aprender, ser
felices y a largo plazo terminar ganando”. Pues teniendo en cuenta que
hablamos de Ferrari, el aprender debía estar ya más que sabido, dominado, para ser
felices, un camión y finalmente para vencer, un bólido rapidísimo y
estable. Lo de los test de Jerez, solo un espejismo…
Este dicho debe ser bastante conocido,
“Ande
que no ande, que sea grande … y muy potente”, pues hasta en Austria
saben a qué me refiero. Así Niki Lauda
ha iniciado una cruzada, que no derrape, en post de unos propulsores mucho más
impetuosos que los actuales. El tres veces campeón del mundo, cree que los mimbres
están ahí, en los seis cilindros en
“V”, inicial de victoria y también de
“Viky”,
con el turbo soplando, más el hybrid
system, pero insuflándoles mucho más gasofla. Resulta más que palmario, que
la afición necesita de sensaciones
desenfrenadas, trepidantes, y estas ahora andan ausentes con tanto “ECO” de
por medio. Así que el sesteo durante los grandes premios va in crescendo. Por tanto Lauda propone
irse rápidamente a los 1.200 CV para el 2017, además de montar en los
bólidos unos buenos rodillos traseros para llevar ese brío al asfalto. Creo que
la afición está contigo Niki, pero de todas, ¡todas!
Fue escuchar las propuestas de Lauda
y de inmediato desde Maranello gritaron, sobre todo Arrivabene, aquello de ¡me lo pido!
La malas lenguas dicen que el humo
de los “pitis”
le entorpecen un poco la visión, tobacco fog, pero de oído anda muy
fino. Maurizio tuvo tal subidón ¡que
hasta llamó amigo al de Mercedes! ¡Y se declaró fan entusiasta de él en sus
años mozos! Con los ánimos por las nubes, que están en el cielo, y siguiendo la
máxima de que por
pedir que no quede, pues venga, motores V8 con dos turbos a 17.000
rpm. Desde Renault, Cyril Abiteboul,
se unió al güateque, aunque eso si, en plan low-cost,
con los dineros muy controlados. Cerrando el festejo, tuvimos la opinión de Toto Wolff, templando posiblemente el
desbarre anterior. El germano dejó bien claro, que los V6 deben ser la base a
desarrollar, pues para llegar hasta ellos se dejaron “sangre, sudor y mucha, pero mucha guita”. Si se pimplaron algunas cervezas, nada dijo.
Resulta cuando menos contradictorio,
estos nuevos propósitos motoriles. Si miramos hacia atrás, allá mediada la década de los años 60,
comprobaremos que los motores de 3 litros, predominio Cosworth, se mantuvieron más de una década. Luego irrumpen, año 1977, las “teteras amarillas”, propulsadas por el motor 1.5 turbo
by Renault. Tras unos iniciales despeñes humeantes, conseguirán
arrastrar al resto hacia ese tipo de motor, llegando hasta 1989, fecha de su prohibición. Llegarán entonces los 3.5 litros atmosféricos, V10 y V12 caso
de Ferrari, hasta 1998, pasando, mutando
todos a los V10 3.0 litros en ese año. Finalmente en el 2006 se pierden dos cilindros,
V8 2.4 litros, hasta el 2014. Y me pregunto ¿quizás aquí sí, tiempos pasados fueron mejores? O al menos ¿no
fueron más competidos, con mayor igualdad y sobre todo, mucho más baratos y
ruidosos?
Y ya que estamos de frases ocurrentes,
ahí va otra “donde dije Vigo, digo A
Coruña”, pues en ambas ciudades el marisco es excelente. La verdad siendo
preciso y veraz, la frase auténtica es algo distinta. Pero la mía viene al
caso, con el ir y luego volver apresuradamente del Ex piloto Philippe Streiff, en relación a sus
acusaciones contra la FIA, Jean Todt y Gerard Saillant. Esta denuncia versaba, sobre un
posible ocultamiento y borrado de importantes datos, que
incriminarían a la terna antes citada, en el gravísimo accidente de Jules Bianchi en la carrera de Japón.
Pero ante la apertura de acciones legales contra Streiff, el francés
rápidamente ha pedido disculpas, se ha
desdicho de lo manifestado. Pena, pues algo huele muy mal, en lo sucedido
en aquella fatídica
vuelta 43. Y creo que a la mayor brevedad posible, alguien debería
exigir las responsabilidades oportunas a la FIA, pero ante un tribunal de justicia.
Pasando a un plano algo más rítmico,
analicemos el comienzo de la siguiente canción infantil: “Me da en la nariz, que como no vengas
pronto a por mí …”. Esto fue lo que me saltó dentro de la chola, al
leer lo dicho por James Allison, sobre
el nuevo morro del SF15-T. Resulta que con respecto al del año anterior, “no
hizo falta cambiarlo mucho”. Así el coche tiene “mucho mejor aspecto” con
la napia redondeada. Luego el asunto se puso algo más serio, pues según Allison
trabajaron en tres aspectos clave, a saber, “un coche competitivo, con muchos
caballos de potencia y muy manejable”. ¡Vale, perfecto James! Imagino
que la flema británica, tendrá algo que ver en declaraciones como estas. Pero in my
opinion o alguien va pronto a Ferrari con otra música mucho más currada,
o el desafine será aún peor que el pasado 2014, y mira que lo fue.
Hay gentes que creen ser Nerón,
aquel famoso emperador bajo cuyo reinado ardió Roma hasta sus cimientos durante
cinco días. Otras dicen ser Napoleón,
de apellido “Boinaparte”
de estar de guasa, gobernante, militar y también emperador francés, muy dado a
las conquistas. Estas se llevaban a cabo por el expeditivo método de la
invasión a cañonazos. Solo el gélido invierno ruso, logró derrotarle. Ahora a
la F1 ha llegado alguien, que se cree futuro dominador, master
of the world, con solo tener noticia de la siguiente aseveración:
“Me
subo al coche, doy un par de vueltas y ya voy rápido”. Así de garboso
se mostró el chicuelo de Max Verstappen,
ante una pregunta formulada por su ex compañero en el mundo de los karts, el
español Alex Palou. Yo quisiera
inmediata aclaración de: ¿en qué coche?
¿Sobre qué trazado esas dos vueltas? Y sobre todo ¿rápido comparado con quién, a cuantos segundos del best
time, a cuántas vueltas
finalmente?
©
Sammas
Ver otros ecos:
“Artículo original en
caranddriverthef1.com”
“Apretando las culatas,
listos, ya”
"De dictámenes, criterios y sensaciones varias"
“De campanas, peces y borriquillos”
“Todo quieto y calmo”
“Cosas de gourmets”
Información de F1 en:
"Callejón de boxes"
Soy al único que cuando Niki Lauda habla lo miro como a un dinosaurio?
ResponderEliminarEs un mito, un trabajador como ningún otro, pero... los coches y la tecnología evolucionan. Entiendo que la F1 es mucho más que CV y potencia. El deporte evoluciona (a veces no a lo que nos gustaría) y siempre acabamos con aquello de "todo tiempo pasado fue mejor".
Saludos
Albert
bristolenos.com
No Albert, no eres el único. Yo también creo que Lauda anda con la F1, un poco como los abuelos "cebolleta contando su mili en las Chafarinas".
EliminarSaludos.
Sam
P.D. Y ya sabes que me puedes leerme todos los jueves en http://www.caranddriverthef1.com/ bajo el epígrade de "La semana que vivimos peligrosamente". En el apartado http://www.caranddriverthef1.com/formula1/articulos están todos los anteriores.