PARA ASIA SE FUERON … PERO ¿CON QUÉ?
La
canción decía “con una media y un
calcetín”, como los que iban para San Fermín en Pamplona. Yo nunca entendí
a que se referían con esos accesorios para la vestimenta. Pero camino de
Singapur, a lo mejor lo de la media se refería más bien a los puntos en el mundial,
a medias mejor dicho. Como las chicanes, que tienen parte de una curva hacia un
lado y la otra al contrario. Así que la cosa está que arde, de ignición en
cualquier momento, de auto@combustión,
casi más inflamable que los frenos delanteros de Raikkonen o una barbacoa de
fumaos hasta las trancas.
No sé si
fue por el largo viaje pendiente hasta un lejano continente o por los trece
grandes premios ya disputados. Vale que pueda influir el solazo que pegaba en
Monza, que
derretía hasta los frenos de algún que otro coche plateao. O quizás
por una bronca previa dada en el backstage de un equipo llamado Mercedes-AMG, pero el pódium visto tras
finalizar el gran premio de Italia, daba más pena que goce, fue de flagelo y no de jarana. Y sobre las caras alegres de dos
pilotos, destacó la tercera, la de
Rosberg, con una media sonrisa muy forzada. Aún siendo segundo en el cajón,
trasmitía la sensación de quererle
atizar a alguien con el “caraco” y tocho botellón de champan francés marca Cordón Rouge G. H. Munn con que les
obsequian. Creo que el germano debe aplicar ya, aquello de “duro de oídos, triunfo seguro”.
Desde
luego la cara de James Allison, no invita tampoco ni a la parranda ni al fiesteo
y menos aún a proponerle que te cuente
una buena ristra de chistes. Como profesional, no dudo de su sapiencia, aunque
por lo visto este año sobre la pista, nota
buena no le doy. Pero en su papel de comunicador, me lo pone aún más
difícil, pues más que noticias, arroja
sentencias o pronunciamientos muy pesimistas. Y es que estando en las
fechas que estamos, proclamar que tiene dudas “que Ferrari alcance a Mercedes”,
aún a lo largo del año 2015, es para poner triste hasta un manojo de geranios, narcisos y
petunias. Encima se puso por la tremenda, hablando de “brechas
muy grandes de cerrar”, que ahí me asustó un poco, pues sé que para
ello ponen grapas y duelen un montón,
que también fui niño hace años.
Toda la afición española a la fórmula 1, tiene el año 2007 grabado como el de “Gibraltá españó ya pero ya”. Que fueron muchas “carbonadas”, cabronadas en
plata, jugarretas y bribonadas, las
sufridas por Alonso dentro del seno - y no confundir con otras “cosas”
¿vale? - de la escudería McLaren.
Como serían las trastadas hacia el piloto patrio, que hasta las gentes de La Línea de la
Concepción dejaron de comprar tabaco en el peñón, que de poco se va a pique la economía de la roca esa tocha. Ahora
Fernando niega contrariedades pasadas, declarando “no tuve problemas con Lewis”;
¡¡¡ ja y ja !!! Yo pensé enseguida en aquello que “perdonar es de sabios”, de juiciosos, de sensatos. Pero también
dicen en mi pueblo, el de la catedral gótica, que una cuestión es ser bueno y otra muy distinta … poner la otra
mejilla para que te aticen de nuevo.
La
mañana de la clasificatoria del gran premio de Monza, se levantó una gran polvareda en la zona
del paddock. Dado lo despejado del cielo, la ausencia de nubes, la
quietud de la hojas en los árboles, todo
el mundo se chupó el dedo y dijo, “pues de soplar aire, ná de ná”. Luego supieron
que era la populachera cohorte, la
legión de periodistas que seguían a Montezemolo, quienes causaban aquello.
Resulta que flotaban rumores de una posible abdicación, de su dimisión al
frente de Ferrari, para quizás tomar “nuevos
vuelos”. Pero el esperado “ciao
amici”, se convirtió en un enérgico y taxativo “tengo mucho trabajo que hacer
junto a Mattiacci”, que luego pasó lo que pasó. Pues dado el
enroque entonces, yo aconsejaba que alguien le fuera dando a Luca el cabezota, un buen juego llaves, de la 13´ a la 24´,
para que desmonte la culata del buga y le busque unos cuantos caballos extra al
cacharro rojo.
Más tarde Sergio Marchionne, presidente de Fiat y Chrysler, leyó lo pregonado por el Marchese
y nos aclaró que algunas de las cosas dichas por Luca, “nunca las habría dicho en su posición”.
Imagino que este hombre, nacido en Chieti hace 62 años, pensará como muchos que
prescindible no hay nadie,
por muy bien que se vendan bajo su dirección, los caros deportivos que ruedan
por las calles, en manos de gentes pudientes. Pero también es cierto, que el
empecinamiento de uno no puede estar por encima de los resultados deportivos,
que menguan temporada tras temporada, hasta límites que rozan lo estrafalario,
lo irrisorio y lo minúsculo. Bueno,
lo del último adjetivo de sonaros raro, cambiadlo
por diminuto.
Al final
y como fruta madura que cae del árbol
afectada por la gravedad, y me refiero claro está a esa fuerza descubierta por Isaac Newton, en un azar del destino,
el pulso Montezemolo VS Marchionne, se resolvió a favor del segundo.
Posiblemente lo visto durante el gran premio de Italia, pudo ser no ya el cubo que desborda la piscina,
sino algo conocido como hasta aquí nos despeñamos, pues más pá bajo no podemos
caer. Así que al despuntar al alba, sin cumplir siquiera tres días
desde la debacle de Monza Luca
Cordero di Montezemolo dimitió, agradeciendo de paso a las gentes de
Maranello, a todos/as los integrantes de la familia Ferrari e incluso a los
clientes y coleccionistas de la marca, su dedicación, entrega y su apoyo a la
misma.
Manfredi Ravetto, que en su dia anduvo dentro de la estructura del desaparecido Spanish
Team, HRT F1, tomó el relevo como jefe de la escudería Caterham por la
renuncia del tulipán Christian Albers,
tras finalizar la carrera italiana. El de los Países Bajos solo adujo cansancio
por todo el trabajo desplegado, tras la reciente adquisición del equipo, que
abanderó desde su llegada a la parilla, año 2010, el malayo Tony Fernandes. También “razones
familiares”, son las mencionadas por Albers para esta renuncia digamos,
un tanto apresurada. Sin ánimo de
precipitarme, pues el tiempo aclarará las causas sin lugar a dudas, un nombre revoletea por mi mente, cuan
murciélago venido de lejanas tierras. Hoy solo os daré una especie de acrónimo,
o para entendernos mejor, unas sencillas siglas: “CoKo”.
Hace
semanas que pasó la época de las margaritas, esas florecillas que brotan en la campiña
por millones y que los amantes deshojan con el consabido: “me quiere, no me quiere”. Pues así anda
Sebastian Vettel con su equipo, antes todo para él, solo suyo, Red Bull. El chaval germano no sabe que hizo mal,
para que no estén tan pendientes como antaño, lleno de lisonjas y arrumacos,
mientras que ahora solo colman de atenciones al australiano Daniel Ricciardo. Así que sincerándose
con los medios de comunicación como nunca antes lo hizo, supimos esto: “No
tengo ninguna confianza en el coche, ninguna de las configuraciones me parecen
correctas”. Encima su ingeniero de carreras, Guillaume Roquelin, ha sido promocionado en la escudería. Así que
más claro … agua, con seltz o
directamente con sal.
El último de los románticos del circo anda en
peligro. Dicen que tiene puesto el cartel “For
sale”, como la canción del grupo Boney M, aunque en lo musical iba
antecedida por “Love”. Y eso creo yo, que es
lo demostrado Peter Sauber a lo
largo de tantos años, desde que en el sótano de la casa de sus padres
construyese el Sauber C1, año 1970.
Era un sencillo bólido, utilizado incluso para ascender colinas, impulsado por
motor Cosworth de un litro, pero suficiente para ser la semilla de otros muchos
coches más, hasta llegar a la F1 en el año 1993. Dicen que un millonario
norteamericano, Lawrence Stroll,
está dispuesto a extender un cheque para comprar esta escudería. Pena de
confirmarse, pues ya antes desaparecieron nombres tales como BRM, Cooper, Surtees, Brabham, Tyrrell o
Minardi, que no hace falta más que mirar para ver como pinta la cosa y pensar en aquellos tiempos felices.
© Sammas
Ver otros ecos:
“Artículo
original en caranddriverthef1.com”
“Todo pasado, ni sabe ni sale bueno … y las
chicanes menos”
“Cambios en spa Francorchamps; pues
ninguno se vió”
“De un lugar nada relajante”
“One week later:
Hungaroring – Hungría 2014”
“Dentro
de un telón, que decían que era de acero”
“One week
later: Silverstone - Gran Bretaña 2014”
Información de F1 en: "Ecos desde
los boxes"
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