PARA EMPEZAR, UNO SE FUE
A LOS JUZGADOS
Que la cosa ya andaba algo liada con la
lista Falciani, una que salió de
Suiza con muchos nombres y números de cuentas bancarias, para que Van der Garde
se fuese a la justicia reclamando un volante. Y casi rememorando la cuarta y
última obra de teatro, de una trilogía escrita por William Shakespeare, Ricardo
III, célebre por la frase “¡Un caballo,
mi reino por un caballo!”, Giedo gritó, “¡mi Sauber, mi pasta o mi asiento!”.
Finalmente todo quedó, parece ser, en un acuerdo extrajudicial, aunque el
“fregao” resultó ser bastante poco estético.
De: keepcalmomatic. Para escuchar: |
Después de lo visto hace ya 15 días,
sobre el asfalto de Albert Park, a manos, pies y cabeza, de la dupla plateá
comandada de manera casi marcial por Lewis Hamilton, seguido de su fiel
escudero de armas, Nico Rosberg, a mi solo se me ocurrió que al subir al podio
debió sonar “We are the champions”. Fue tal el dominio de los Mercedes, casi
35 segundos al tercero, que aún en la primera prueba de la temporada, el resto
de las citas se antojan un calco de lo allí visto. Y aún dando por hecho, que
estamos ante carreras de bólidos, lo que
no puede ser es que un par de ellos vuelen sobre las rectas, pasando por
las curvas como si fuesen encarrilados en un caro y exclusivo trazado AVE, sin
dar un solo bandazo. Mientras, el resto parece reptar trabajosamente a duras
penas sobre la pista, oliendo los gases despedidos por los propulsores hybrid germanos, pero muy a lo lejos,
allende en el horizonte, en una galaxia
muy, muy lejana, al menos técnicamente.
Y no solo los espectadores, ya fueran en directo en el circuito o por televisión, pueden empezar a olerse la tostá, sino que hasta Christian Horner rompió en cólera visto lo sucedido por esas tierras llenas de canguros. El británico muy disgustado, very angry in english, llegó a decir que una competición es sana cuando existen “mecanismos que las equilibren”. De las temporadas 2010 a 2013 nada dijo desde luego. Así que como a “buen encendedor, pocas clicadas bastan para ver una llama”, enseguida el team manager de Red Bull Racing sacó el tema de coger las de Villadiego e irse con el kiosko a otra parte. Luego retrocedió unos metros y sin perder la ocasión, animó a McLaren a seguirles, ahora formando una coalición, una alianza firme, para exigir a la FIA barra libre en cuanto al desarrollo de los propulsores. ¡Qué necesario es el amor en tiempos de tristeza, melancolía y aflicción!
Claro está, que una cosa es quejarse del tiempo atmosférico, lo hacemos todos a veces, y otra muy distinta el no aprovechado en fórmula 1 para encontrar la llave, “matarile-rile”, con la que vencer a tus rivales, “rile-rile-ron”. Así que los quejidos surgidos desde la escudería energética con sede en Milton Keynes, fueron rápidamente contestados y rebatidos desde Mercedes, Toto Wolff said, con un escueto y directo al mentón: “lo que deben hacer es trabajar duro y solucionar sus problemas”. De paso les indicó el lugar donde pueden sollozar a gusto, tanto de palabra como por escrito: el muro de las lamentaciones en Jerusalén. Niki Lauda cerró la tanda con un gancho de derechas, dejando claro cuál es el objetivo de la F1 actual, “la máxima innovación tecnológica”. Para mí el austriaco pensaba por lo bajinis, que de estar en el formulerio para otros menesteres, léase vender refrescos enlatados, quizás Disneylandia sea un lugar mucho más apropiado, juvenil y divertido.
Y no solo los espectadores, ya fueran en directo en el circuito o por televisión, pueden empezar a olerse la tostá, sino que hasta Christian Horner rompió en cólera visto lo sucedido por esas tierras llenas de canguros. El británico muy disgustado, very angry in english, llegó a decir que una competición es sana cuando existen “mecanismos que las equilibren”. De las temporadas 2010 a 2013 nada dijo desde luego. Así que como a “buen encendedor, pocas clicadas bastan para ver una llama”, enseguida el team manager de Red Bull Racing sacó el tema de coger las de Villadiego e irse con el kiosko a otra parte. Luego retrocedió unos metros y sin perder la ocasión, animó a McLaren a seguirles, ahora formando una coalición, una alianza firme, para exigir a la FIA barra libre en cuanto al desarrollo de los propulsores. ¡Qué necesario es el amor en tiempos de tristeza, melancolía y aflicción!
Claro está, que una cosa es quejarse del tiempo atmosférico, lo hacemos todos a veces, y otra muy distinta el no aprovechado en fórmula 1 para encontrar la llave, “matarile-rile”, con la que vencer a tus rivales, “rile-rile-ron”. Así que los quejidos surgidos desde la escudería energética con sede en Milton Keynes, fueron rápidamente contestados y rebatidos desde Mercedes, Toto Wolff said, con un escueto y directo al mentón: “lo que deben hacer es trabajar duro y solucionar sus problemas”. De paso les indicó el lugar donde pueden sollozar a gusto, tanto de palabra como por escrito: el muro de las lamentaciones en Jerusalén. Niki Lauda cerró la tanda con un gancho de derechas, dejando claro cuál es el objetivo de la F1 actual, “la máxima innovación tecnológica”. Para mí el austriaco pensaba por lo bajinis, que de estar en el formulerio para otros menesteres, léase vender refrescos enlatados, quizás Disneylandia sea un lugar mucho más apropiado, juvenil y divertido.
Cuentan que hace años, muchos, allá por
los cincuenta, la prensa británica ante persistentes y contumaces brumas entre
las islas y el continente, publicó el siguiente titular: “Niebla en el canal, Europa queda aislada”. Pues a día de hoy, de
ayer y de mañana, y más con lo visto en Sepang, una escudería
cuya sede se enclava en el Condado de Surrey, concretamente en Woking, parece
estar ya desconectada de cualquier lucha en el mundial 2015. Y es que lo visto
sobre el asfalto de Albert Park, primera carrera del año, es de difícil
catalogación por el fiasco allí presenciado. Los libres fueron para olvidar, la clasificación un desastre, a más
de 5 segundos del poleman. Y encima en la vuelta de formación perdieron no solo
el coche de Magnussen, sino también uno de los cuatro propulsores de la
temporada, para el dorsal número 14, el de ALO. El único superviviente del
team, Button, rodó a casi dos segundos
de los monoplazas que les precedían, los cuales eran de “media tabla”. Oscuros
nubarrones se ciernen sobre este proyecto sin duda y más pensando que dejaron
atrás un power unit como el de Mercedes.
Los legionarios, al menos antaño, llevaban orgullosamente tatuado en el brazo algo conocido como “amor de madre”. En los campamentos de verano, aquellos también llamados “Colonias”, aunque luego oler dentro de las tiendas más bien a tigre, los padres pedían a los monitores un buen trato para sus retoños. Centrándonos en la F1, el primer padre coraje fue Anthony Hamilton, allá por el 2007, con denuncias constantes hacia el compi de su vástago. Le sucedió Nelson Piquet, hombre de memoria un tanto parsimoniosa, a nueve meses vista como mínimo, con aquello del crashgate of Singapore 2008. Pues bien en el 2015, ya tenemos otro papichuli dispuesto a dar la nota. Así Jos Verstappen, el aita o padre en euskera de Max, exigió ni más ni menos al motorista galo, un propulsor digno para el talento de su zagal driver. “Renault necesita trabajar más duro” dijo. Veo a Bernie frente a una pizarra y tiza en mano, pues su circo torna cada vez más a cole, a insti, a un aula problemática.
Otro padrazo ha demostrado ser Maurizio Arrivabene, pues cuida a sus retoños con multitud de mimos. Día sí, día también, habla maravillas del dúo Sebastian Vettel & Kimi Raikkonen. Que si el primero es listo y el segundo rápido. Otras les lanza piropos varios, al uno por ser tetracampeón y al otro por tener solo uno, pero muy valioso. Como serán las cosas de paternales, que el incidente en el pit del nórdico con su rueda trasera mal apretada, se saldó con una petición instantánea de explicaciones al hombre de la pistola neumática. De estar en el lejano oeste, a ese mecánico yo le hubiese augurado mal futuro, corta vida. Hasta el finlandés habla por la radio, y me refiero a más de una palabra seguida, varias, enlazando frases y largas. Todo viene porque Mauri le repite esto: “si eres como un martillo y aprietas como un demonio, tus tiempos serán muy buenos”. Estamos sin duda ante el nacimiento de “Ice Hammer”.
Los legionarios, al menos antaño, llevaban orgullosamente tatuado en el brazo algo conocido como “amor de madre”. En los campamentos de verano, aquellos también llamados “Colonias”, aunque luego oler dentro de las tiendas más bien a tigre, los padres pedían a los monitores un buen trato para sus retoños. Centrándonos en la F1, el primer padre coraje fue Anthony Hamilton, allá por el 2007, con denuncias constantes hacia el compi de su vástago. Le sucedió Nelson Piquet, hombre de memoria un tanto parsimoniosa, a nueve meses vista como mínimo, con aquello del crashgate of Singapore 2008. Pues bien en el 2015, ya tenemos otro papichuli dispuesto a dar la nota. Así Jos Verstappen, el aita o padre en euskera de Max, exigió ni más ni menos al motorista galo, un propulsor digno para el talento de su zagal driver. “Renault necesita trabajar más duro” dijo. Veo a Bernie frente a una pizarra y tiza en mano, pues su circo torna cada vez más a cole, a insti, a un aula problemática.
Otro padrazo ha demostrado ser Maurizio Arrivabene, pues cuida a sus retoños con multitud de mimos. Día sí, día también, habla maravillas del dúo Sebastian Vettel & Kimi Raikkonen. Que si el primero es listo y el segundo rápido. Otras les lanza piropos varios, al uno por ser tetracampeón y al otro por tener solo uno, pero muy valioso. Como serán las cosas de paternales, que el incidente en el pit del nórdico con su rueda trasera mal apretada, se saldó con una petición instantánea de explicaciones al hombre de la pistola neumática. De estar en el lejano oeste, a ese mecánico yo le hubiese augurado mal futuro, corta vida. Hasta el finlandés habla por la radio, y me refiero a más de una palabra seguida, varias, enlazando frases y largas. Todo viene porque Mauri le repite esto: “si eres como un martillo y aprietas como un demonio, tus tiempos serán muy buenos”. Estamos sin duda ante el nacimiento de “Ice Hammer”.
Una noticia que ha pasado algo
desapercibida, es el renovado interés de
Renault por regresar con team propio a la F1. Dicen que Alain Prost,
embajador de la marca gala, ya tiene camelao
al director ejecutivo de la misma, Carlos Ghosn. Y el team elegido no es su
antiguo socio, Lotus, ahora bajo dominio germano en cuanto a su propulsión, sino la
Scuderia Toro Rosso, la antigua y querida Minardi. Helmut Marko,
alguien que por allí pinta algo, no lo confirmó aunque dejó caer una de sus
perlas: “quizás vendamos STR, aunque no tememos porque hacerlo”. Su
jefe, Mateschitz, fue menos remolón, “sería bueno para Toro Rosso, estar junto a
un gran fabricante”. Cerrando la tanda de dimes y diretes, Cyril
Abiteboul, director general de Renault F1, solo dijo que este equipo ya es
actualmente cliente motoril. Luego sin embargo afirmó que los del rombo
barruntan “nuevas estrategias de marketing”.
Algo se mueve en Red Bull Racing, quizás
en dirección a una futurible mudanza del circo.
©
Sammas
Ver otros ecos:
“Artículo
original en caranddriverthef1.com”
“One week later: Albert Park – Australia 2015”
“One week later: Albert Park – Australia 2014”
“¿Y sí los sueños, sueños son?”
http://samgp2250.blogspot.com.es/2015/03/ecos-desde-los-boxes-ensonando-que-es.html
“Cuando diciendo su verdad, alguien
quizás esté mintiendo”
“De cuadrillas, camarillas
y grupos”
Información
de F1 en: "Callejón de boxes"
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